Culturización de que las mujeres pueden solas

Se procede del mismo modo (uno con los ojos vendados, el otro ofreciendo los alimentos), mas esta vez los elementos pueden colocarse en la boca y pasarse de esta forma, o bien dejarse en diferentes s del cuerpo, de manera que el compañero vendado tenga que buscar el objeto con su olfato y gusto.

Edificando cimientos

El Marqués en la última página de su obsesiva obra: Justina , hace fallecer a Justina fulminándola por un rayo y escribe presurosamente: Aquí acaba la historia de Justina, un relato de buena conducta bien castigada . (pág. 182)