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La tanga más sexy es la que no se usa para ropa de calle, sino que está reservada solo para el sexo: el primer beso genital directo se da, o bien se toma, a través de él. Después, ella puede sorprenderlo tomando de repente los dos extremos y poniéndolo con fuerza sobre su nariz y boca.

Hola mi nombre es Amalya, soy una lumi dulce y cariñosa. En mí, encontrarás una genial compañera de aventuras. Te espero para vivir, y disfrutar, de unos momentos imborrables …

Le di un beso a Eric y a Fernando le estreché la mano prometiéndole que yo entregaría la documentación personalmente al director de la agencia porque aún no estaba preparada. Su cara parecía 2 signos de interrogación con un círculo en medio.

El anfitrión decide en que momento se presentará el negocio o bien tema a tratar, y no es apropiado retirarse inmediatamente después de haber terminado de comer, un tiempo prudente para una sobremesa es lo mejor, y si esta se extendiera demasiado, se recomienda concertar una asamblea para otro día.

Hay grandes fallos que muchos hombres cometen con las mujeres. Aceptan que la apariencia y el dinero son las dos características esenciales de un hombre que son atractivas para las mujeres. Pero esta es una doctrina falsa y en modo alguno corresponde a la verdad.

Abrázame: deseo abrigarme entre tus brazos, compartir mil besos en nuestra piel desnuda, déjame mirarte mientras que disfrutas de mis pechos, deseo que disfrutes de mis caderas y de mi entrepierna. Ahora me toca a mí ?

En el momento en que una mujer se acuesta con un hombre desde el primer momento, se termina la cacería, puesto que ya logró a la presa en bandeja de plata. Los hombres aceptan que si el sexo es demasiado fácil de conseguir, no es tan bueno y, por esta razón, no consideran la relación como algo serio.

Con una presencia siempre impecable, su estilo será el apropiado para cualquier ocasión en que la requieras.

No juegues a hacerte el bastante difícil. Las chicas no soportan que el chaval que le gusta no le haga caso, pueden llegar a meditar que no la quiere. Acuérdate que puede haber otro muchacho que la quiera conquistar.

En consecuencia, ahora más que nunca ne­cesita el hombre sentirse seguro del amor, sin lástima de su compa­ñera. La mujer deberá esforzarse por evitarle todo lo que pueda interpretarse como una herida a su estimación, a su hombría, a su virilidad.