¿Un capricho? Tal vez

Tenía que llamar a la puerta de conexión de nuestras habitaciones y si Frank lo deseaba me dejaría entrar. Si no, estaríamos listos para cenar a las 7:30, y nos hallaríamos en el vestíbulo. Me fui a la conferencia tras ducharme y hacer las reservaciones. Estuve aturdido todo el día.

La empatía es entrar descalzo al corazón del otro

Haz un regalo que esté metido en una caja, y esta en otra. Y esta nueva en otra más. A fin de que se pase un rato desempaquetando y rompiendo papel de regalo. Cuando llegue a la caja final que encuentre que el regalo es una nota. Unas simple línea que ponga: eres lo mejor que me ha pasado en esta vida.

El erotismo del vampiro

Tal y como si a la bestialidad sexista no pudiera oponerse una ternura masculina. Como si lo viril estuviera exento de delicadeza. Tal y como si el hombre fuese solo un suplicio que solo mejora cuando se comporta como una mujer.

La segunda, que el ano haya sido forzado

Nati tenía por entonces 38 años y hacía cuatro o bien 5 que se había separado. Su ex marido la había dejado por una chica de poco más de 20. Una historia, por repetida, tristemente trivial. Empezó a chatear por el hecho de que se sentía sola y quería hallar pareja.